El fin de semana anterior a que se decrete la cuarentena en Argentina, viajé con mi familia a Cariló para celebrar el cumpleaños de mi mamá, como les conté en Twitter y en Instagram.
Hoy, con el diario del lunes, pienso que no habríamos viajado, pero vale la pena recordar cómo se vivía la situación en ese momento, y cómo todo fue escalando tan rápido: Nos fuimos el 14/3, con 45 casos y 2 fallecidos en todo el país, y regresamos el 17/3, con 79 casos en total y sin nuevas víctimas fatales. En Cariló no había ningún caso. El 16/3 fue el primer día sin clases, el 18/3 comenzaron las medidas restrictivas, y la cuarentena nacional comenzó el 20/3, con 158 casos y 3 fallecidos.
Fuimos en auto, y mientras volvíamos escribí un posteo contando lo que sentí al estar fuera de casa en ese momento.
Cuando fuimos no se sabía qué pasaría y los hoteles ya estaban tomando algunas medidas de seguridad para prevenir los contagios de Coronavirus. Hoy ya se está hablando de otro tipo de acciones, que incluyen reducir la capacidad de huéspedes, modificar la modalidad de comida buffet, extremar medidas de limpieza, priorizar actividades de ocio al aire libre, evitar hacer colas, que el personal use barbijos, y distribuir alcohol en gel, entre otras que pueden leer en esta nota.
En este posteo, les cuento todo lo que implementó Cariló Village por la pandemia del Coronavirus, y les cuento cómo fue mi experiencia en el hotel.
Medidas que tomó el hotel por el Coronavirus:
- Antecedentes de viaje: El hotel no dejaba hospedarse a nadie que en los 14 días anteriores haya estado en uno de los países que eran considerados de riesgo en ese momento. Para esto había que completar un formulario declarativo
- Comidas: Había que reservar absolutamente todas las comidas, incluso el desayuno. Los turnos limitaban la cantidad de personas, y además las mesas tenían una distancia de 2 metros entre sí. El personal tenía guantes. No había otras medidas que ahora pueden parecer más obvias como el uso de barbijos o que no haya buffet para evitar que todos se sirvan con los mismos utensilios o bien contaminen la comida expuesta
- Instalaciones: Para hacer uso de las piscinas y spa también había que reservar turno. En el caso de las piletas, sólo se podía ingresar de a 15 personas y los turnos eran de 1 hora y media. Con mi familia completábamos el cupo, así que siempre estuvimos solos
No vimos ninguna otra medida especial por el Coronavirus, aunque hay que decir que todo estaba muy limpio, y en ese entonces no se sabía todo lo que conocemos ahora.
Nuestra experiencia en Cariló Village
El hotel es muy lindo y está en pleno centro de Cariló, aunque rodeado de mucho verde. Sin dudas se respira paz y tranquilidad en este entorno natural! Pero todo lo lindo que tiene el hotel se vio empañado por el trato que recibimos…
Fuimos en un grupo grande, de 15 personas, y ocupamos 4 cabañas. Mis padres reservaron meses antes por el cumpleaños de mi mamá y, a pesar de eso, el hotel no tomó en cuenta la importancia de la celebración y pasamos por algunas situaciones incómodas.
En cuanto a la comida, el hotel tiene 3 opciones: sólo desayuno, media pensión y pensión completa. Fuimos con todas las comidas incluidas y la verdad que en caso de volver optaríamos sólo por el desayuno, ya que el almuerzo y la cena no estaban a la altura del lugar ni del costo. Los platos siempre eran los mismos, había poca variedad y la calidad era normal. Al estar en frente del centro, sin dudas conviene ir a comer a cualquier restaurante, que incluso cuestan menos.
Constantemente teníamos problemas con los horarios de reserva de las comidas, porque se olvidaban de anotarnos. Tal es así que el desayuno del cumpleaños de mi mamá lo tuvimos que tomar en el salón de abajo, aunque mis papás no podían subir las escaleras para servirse en el buffet. Nadie del hotel se ofreció a facilitar la situación, y obviamente nosotros les llevamos la comida, pero uno espera otro tipo de atención.
Siempre que preguntábamos algo, hacíamos una sugerencia o nos quejábamos por una situación, nos trataban de mala manera. Por ejemplo, una noche al pedir un bife con papas que está en el menú, me trajeron este plato que, como ven, tiene 2 (dos) rodajitas de papa. Le consulté amablemente a la camarera si podía traer más papas, ya que me parecían muy pocas, y la respuesta fue «el plato viene así, si quiere llamo al chef y se queja con él»…
En Cariló Village hay 3 piscinas: una al aire libre, una cubierta para adultos, y otra cubierta para adultos y chicos. Además, hay un spa. Dan toallones pero si uno quiere batas, se cobran aparte. No tienen playa pero sí prestan reposeras y sombrillas, que tiene que cargar uno y hay que caminar unas 5 cuadras.
Así es la cabaña para 3 personas, y también hay otras de 3 ambientes y 2 baños con capacidad para hasta 6 huéspedes. Todas con cocina. Muy lindas y cómodas.
También hay juegos para chicos afuera y un sector cerrado en el que en temporada se dan actividades, pero cuando fuimos sólo se puede ingresar pidiendo la llave y jugar con lo que hay. Estábamos solos!
Y este es el gimnasio:
Un clásico de Cariló Village son los hermosos pavos reales que se pasean por el predio! Incluso hay una gran jaula en donde se puede ver a los más chiquitos. Y sí, Ari los perseguía y aprendió a decir «pavo»!
En cuanto al Coronavirus, cada día nuestra preocupación iba en aumento. Por suerte en el hotel no había mucha gente, todo el espacio es abierto y prácticamente no salimos de ahí. Fue similar a estar en cuarentena pero en un hotel muy lindo, con mucho verde y con toda mi familia.
Al regresar camino a Buenos Aires, veíamos cómo detrás de nosotros se cerraba Cariló, Pinamar y la ruta se volvía desierta.
En resumen, no diría que no volvería a este hotel, pero en caso de regresar a Cariló, exploraría también otras opciones, sobre todo buscando un lugar donde nos traten bien y hagan que la estadía sea amena. Sé que es un hotel con sus años de trayectoria, y quienes eran habitué me dijeron que cambió bastante.
Respecto a las medidas que irán tomando los hoteles por el Coronavirus, creo que a medida que se vayan habilitando, el panorama estará cada vez más claro. Hoy en Argentina aún es muy pronto para pensar en volver a viajar.
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